Cerca de 10.200 niñas, niños y jóvenes, así como el equipo docente de 20 instituciones educativas distritales, se benefician con la instalación de nuevos tanques de almacenamiento de agua donados por la Fundación PLAN.
Los tanques, con capacidad de almacenamiento de mil litros cada uno, le permite a cada institución beneficiada mejorar su capacidad de almacenamiento y suministro del líquido vital, así como garantizar la normalidad en las jornadas académicas durante los días de racionamiento, contribuyendo además a reducir el ausentismo escolar.
“Para Fundación Plan y por supuesto para el Distrito y la Secretaría de Educación, es fundamental garantizar la prestación del servicio educativo en presencialidad. Es por esto qué nos comprometimos con el Distrito y logramos una generosa donación de Plan Japón para que las niñas y los niños, a pesar de la situación que sufrimos de sequía y desabastecimiento de agua en la ciudad de Bogotá, puedan continuar teniendo sus clases presenciales. Estos 20 tanques que entregamos Fundación Plan y Plan Internacional a través de Plan Japón, y la adecuación que hizo el Distrito en 20 diferentes instituciones educativas, van a permitir que las niñas y niños puedan seguir viniendo a clase sin interrupciones”, afirmó Ángela Anzola de Toro, presidenta ejecutiva de Fundación PLAN.
En este mismo sentido, la secretaria de Educación, Isabel Segovia, reafirmó la importancia de mantener la presencialidad en la educación para garantizar no solo el bienestar de los estudiantes, sino procesos efectivos de aprendizaje. “Estamos en el colegio Nicolás Gómez Dávila de Ciudad Bolívar recibiendo simbólicamente un tanque de una donación que hizo Plan Internacional a través de Plan Japón que nos donó 20 tanques para distintos colegios que no tenían suficiente capacidad y que normalmente estábamos surtiendo con carrotanques. Estamos muy agradecidos y es muy importante que todos nos unamos en este esfuerzo”, manifestó y reiteró que la presencialidad es completamente insustituible y los colegios deben ser los últimos en cerrar, pues un niño que falta al colegio está expuesto a situaciones que pueden afectar su bienestar y que, al acumularse, lo ponen en desventaja con relación a otros niños que pueden acceder a otro tipo de oferta, profundizando la desigualdad y las brechas.
Así mismo, recalcó el rol y la conciencia que tienen las niñas, niños y jóvenes en la ciudad frente al cuidado del agua, una responsabilidad que requiere el compromiso de todos los sectores de la ciudad y que desde las instituciones educativas se viene trabajando permanentemente con el objetivo de lograr un uso eficiente y el ahorro del agua en las jornadas académicas. “Los niños en este colegio se han organizado muy bien para que efectivamente el agua que tienen les alcance y se han convertido en parte de los Guardianes del Agua que nos están ayudando a todos, tanto a la comunidad educativa como en sus casas, a ahorrar agua y entender la importancia que este recurso tiene en nuestras vidas”, puntualizó.
