Completó 32 años de vida criminal. Alias Huber tuvo la oportunidad de deponer las armas y volver a la legalidad en 2016; sin embargo, habría decidido aliarse con ‘Gentil Duarte’ e ‘Iván Mordisco’ para seguir en la clandestinidad y convertirse en el presunto enlace financiero de las estructuras disidentes del oriente del país.
El material de prueba obtenido por la Fiscalía General de la Nación indica que Huber de Jesús Escobar Saldarriaga, alias Huber, sería el responsable del cobro de extorsiones a comerciantes, ganaderos, transportadores y población civil en Guaviare, Meta y Caquetá.
Además, hay indicios de que habría fijado cuotas para permitir que las estructuras
narcotraficantes procesen y saquen clorhidrato de cocaína de esta zona del país.
Las denuncias en su contra dan cuenta de amenazas de muerte e intimidaciones constantes mediante panfletos y activación de artefactos explosivos.
En las acciones militares contra los máximos cabecillas disidentes en el oriente, alias ‘Gentil Duarte’ e ‘Iván Mordisco’, fueron
encontrados informes contables en los que el alias de Huber figura como el principal
proveedor de recursos ilícitos para las estructuras residuales conocidas como frente primero y frente séptimo.
Es así como este hombre se convirtió en un objetivo judicial. Sin embargo, cuando su nombre empezó a aparecer en los registros de los disidentes más buscados, intempestivamente desapareció.
En los sectores La Cristalina, Termales, Patio Bonito, San Miguel y Miravalle en Calamar (Guaviare), inició el rumor de que habría sido asesinado por la misma estructura
ilegal.
Haciendo pasar como muerto, hace dos meses alias Huber se trasladó a la vereda Santa Ana de Guática (Risaralda), de donde era oriundo. Allí intentó esconderse, pero fue interceptado en un puesto de control de la Policía Nacional.
En ese momento quedó en evidencia y fue
capturado en atención a una orden judicial obtenida por la Fiscalía.