“La ley señala que las EPS deben garantizar a sus pacientes las cirugías reconstructivas que buscan recuperar la forma o la función perdida como consecuencia de un trauma o una enfermedad. Una gran cantidad de personas que padecen cáncer no conocen sus derechos e ignoran que deben ser tratados como de “especial protección”. Así las cosas, nos unimos con la Fundación Ellen Riegner para informar a quienes sufren esta enfermedad las condiciones que tienen que cumplir para solicitar a su EPS una cirugía de este tipo”, aseguró Esteban Jaramillo, reconocido cirujano estético y reconstructivo.

Según Diana Rivera, directora ejecutiva de la Fundación Ellen Riegner de Casas, “llevamos 18 años ayudando en toda Colombia a hombres, mujeres, niños y niñas de escasos recursos que padecen cáncer. Con esta alianza, continuamos trabajando para brindarles condiciones dignas y apoyar su recuperación física y emocional. Es muy importante que conozcan sus derechos y la manera de hacerlos valer ante el Plan Obligatorio de Salud (POS).

La campaña también busca desmitificar la connotación exclusivamente estética de la cirugía plástica. El componente reconstructivo de la cirugía plástica permite a pacientes con diferentes tipos de cáncer, atender y recuperar la funcionalidad y el equilibrio psicológico que afectan negativamente a quienes lo padecen, alterando su bienestar físico y emocional.

El POS define la cirugía plástica estética, cosmética o de embellecimiento como “un procedimiento quirúrgico que se realiza con el fin de alterar o mejorar la apariencia del paciente sin efectos funcionales orgánicos”. A su vez, define la cirugía plástica reparadora o funcional (reconstructiva) como “un procedimiento quirúrgico que se practica sobre órganos o tejidos con la finalidad de mejorar, restaurar o restablecer la función de los mismos, o evitar alteraciones orgánicas o funcionales”.

La campaña, que se implementará entre los meses de septiembre y diciembre del presente año, incluye la edición y difusión digital de cuatro cartillas informativas y una sinergia en redes sociales para informar a los beneficiarios de la Fundación y a la ciudadanía en general acerca de los derechos que en esta materia tienen ante las EPS.

Para Jaramillo, “Algunas personas e incluso médicos desconocen la frontera que existe entre la cirugía estética y la reconstructiva. El linfedema, conocido vulgarmente como elefantiasis, algunas parálisis faciales, la reconstrucción mamaria y hasta ciertas cicatrices en el cuello o las articulaciones que aparecen como consecuencia del cáncer o de su tratamiento, pueden ser candidatos de una cirugía

reconstructiva que debe realizar la EPS. Esto claramente depende del tipo de lesión, la valoración médica y el estudio clínico”.

Por su parte, Rivera indicó que “Es muy importante que las personas que ayudamos, en especial por ser de muy bajos ingresos, sepan que, de acuerdo con la Corte Constitucional, el cáncer es una enfermedad ruinosa o catastrófica que tiene un gran impacto negativo en la salud y en la vida de quienes la padecen, por lo que gozan de una protección especial que en muchos casos les permite acceder a cirugías reconstructivas”.

La cirugía plástica reparadora (conocida como reconstructiva), incluye reconstrucciones, reparación de ciertas estructuras de cobertura y soporte, manejo de malformaciones congénitas y secuelas de procesos adquiridos por traumatismos y tumores de cualquier parte del cuerpo.

El trabajo mancomunado que realizarán el cirujano Esteban Jaramillo y la Fundación Ellen Riegner es una acción más de la campaña “Espejos, espejismos y realidades”, la cual busca concientizar sobre la importancia de humanizar la cirugía plástica estética y reconstructiva.