El gobierno del Presidente Iván Duque reafirma su compromiso de trabajar con todas las instituciones y estamentos de la sociedad para hacer una transformación al interior de nuestra Nación y acabar con la cultura permisiva de violencias en contra de las mujeres, niños, niñas y adolescentes.
La integridad, la dignidad y la protección de la ciudadanía constituyen nuestro compromiso indeclinable. En este trabajo, contamos con el liderazgo de la Vicepresidencia de la República, la Primera Dama de la Nación, el Ministerio de Defensa Nacional, el ICBF, la Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, y la Consejería Presidencial para la Niñez y la Adolescencia.
Todos tenemos el deber de aunar esfuerzos para eliminar el flagelo de la violencia en nuestra sociedad. En días pasados, se llevó a cabo un Consejo de Seguridad bajo el liderazgo del Presidente de la República, el primero en la historia del país en el que se abordó exclusivamente el tema de la violencia en contra de las mujeres y las estrategias de prevención, denuncia y reacción oportuna. Una de las directrices adoptadas fue el trabajo conjunto con la Fuerza Pública reconociendo las acciones que cada una de estas instituciones viene haciendo de años atrás, para fortalecer y redoblar conjuntamente el mensaje en las escuelas de formación militar y policial, sobre el respeto para todos los ciudadanos y, en particular, por la igualdad e integridad de las mujeres.
En el día de hoy hemos sostenido una reunión con el Señor Ministro de la Defensa Nacional, Doctor Carlos Holmes Trujillo; el Comandante General de las Fuerzas Militares, General Luis Fernando Navarro; el Comandante de la Fuerza Aérea Colombiana, General Ramsés Rueda; el Comandante de la Armada Nacional, Almirante Evelio Ramírez; el Comandante del Ejército Nacional, General Eduardo Zapateiro; el Director de la Policía Nacional, General Oscar Atehortua y la Consejera Presidencial para la Equidad de la Mujer, Gheidy Gallo Santos.
Se acordó la instalación de una mesa de trabajo para complementar y coadyuvar la labor de toda la Fuerza Pública en la promoción de la mujer colombiana, sus derechos y garantías y la protección contra todo abuso, acoso o discriminación en su contra, teniendo en cuenta el reconocimiento del enfoque diferencial étnico y cultural.
En particular, la Mesa trabajará sobre la pedagogía, alertas tempranas, mecanismos de prevención para desarrollar de manera permanente al interior de la Fuerza Pública y los controles necesarios para evitar cualquier abuso en contra de las mujeres. Así mismo, se fortalecerán los mecanismos de incorporación de nuestros soldados que prestan el servicio militar, con pruebas psicológicas que contribuyan a identificar oportunamente cualquier rasgo misógino o violento y cualquier actitud de discriminación o riesgo de acoso en contra de las mujeres.
Esta Mesa estará conformada por la Vicepresidencia de la República, el Ministerio de Defensa Nacional, un representante de cada una de las Fuerzas Militares y de la Policía Nacional, un representante del Despacho de la Primera Dama, así como representantes del ICBF, la Consejería Presidencial para la Niñez y la Adolescencia, la Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer y expertos forenses y en psicología, con trayectoria comprobada en el tema.
La Mesa entregará a más tardar en 30 días, un plan de trabajo con recomendaciones y un cronograma de implementación para el fortalecimiento de la cultura institucional de respeto a los Derechos Humanos, especialmente de niñas, niños, adolescentes y mujeres, como parte de la Política de Seguridad, así como la mayor promoción en la formación en Derechos Humanos y la premisa de cero tolerancia con los delitos y la impunidad.
Así mismo, dicha mesa tendrá como objetivo estimular el desarrollo de las mujeres militares y de policía, promover la vinculación de más mujeres a la fuerza pública y contribuir a su desarrollo para que la sociedad colombiana se beneficie de su liderazgo y excelencia y reciba su aporte para tender mejores puentes de convivencia y armonía en la sociedad colombiana, así como el continuo fortalecimiento institucional de la fuerza pública.
La coyuntura por la que atraviesa la humanidad y el compromiso de los colombianos por lograr las transformaciones que nos permitan alcanzar un país tolerante, respetuoso y en paz, ameritan que todos los sectores de la sociedad asuman un mayor nivel de conciencia sobre su responsabilidad en eliminar conductas de tolerancia que han normalizado comportamientos violentos e inaceptables contra la integridad física, psicológica y sexual de la mujer, para tomar entre todos los correctivos correspondientes.
