La aerolínea SATENA recibe hoy 11 de julio del 2025, la Cruz de la Solidaridad Social, una de las más altas distinciones otorgadas a entidades con impacto transformador en el país. Este reconocimiento, entregado por la Fundación Manos al Cielo, exalta el compromiso de la aerolínea con el bienestar colectivo, la conectividad incluyente y el desarrollo integral de comunidades en zonas de difícil acceso.
La ceremonia se realizó en el Capitolio Nacional, donde se rinde homenaje a la labor que SATENA ha desempeñado durante más de 60 años, conectando territorios que históricamente han estado al margen de la infraestructura tradicional y de las oportunidades institucionales.
Para el Mayor General Óscar Zuluaga Castaño, presidente de SATENA, esta condecoración representa mucho más que un logro institucional: “Este es un reconocimiento al trabajo silencioso pero profundo que hemos realizado a lo largo de décadas. Volar para nosotros es un acto de servicio, una manera de acercar el Estado a donde más se necesita y de llevar esperanza a cada rincón de Colombia. Nos honra profundamente saber que ese propósito colectivo está siendo valorado.”
La Cruz de la Solidaridad Social distingue a organizaciones nacionales e internacionales por su contribución desinteresada al tejido social del país, especialmente en contextos vulnerables. En el caso de SATENA, el galardón reconoce su rol como aerolínea estatal con vocación social, que ha llevado servicios médicos, educativos, institucionales y económicos a regiones que carecen de otras alternativas de conectividad.
Este reconocimiento es por cada historia que vuela con nosotros. Es por los pescadores de Bahía Solano, que envían sus productos al centro del país promoviendo la economía de su región; por los niños de Acandí que, junto a sus padres, volaron con SATENA a Medellín en busca de una cirugía que cambia vidas; por la niña de Apartadó, con diagnóstico de labio fisurado y paladar hendido, que fue trasladada con su padre para iniciar su proceso médico; por los 11 deportistas de la Fundación CIREC que participaron en el Gran Fondo de Nairo Quintana; por jóvenes como Mochoman, que soñaban con competir en la Ruta del Jaguar y lo lograron.
“Este galardón nos impulsa a seguir ampliando nuestra cobertura, sabiendo que cada ruta abierta representa una oportunidad nueva para las comunidades. Nuestro compromiso es seguir siendo el puente entre los territorios y las soluciones que cambian vidas”, añadió Zuluaga Castaño.
La entrega de esta condecoración no solo ratifica el valor del legado social de SATENA, sino que consolida su lugar como un actor esencial en la construcción del país desde las regiones. En un momento en que su plan de expansión aérea redefine el mapa de la conectividad nacional, este reconocimiento reafirma que volar con propósito es, más que una misión institucional, un compromiso inquebrantable con el futuro de Colombia.