Conocida como “El Vaticanito del Oriente Antioqueño”, La Ceja es un municipio ubicado en el oriente antioqueño. Su nombre se debe a que se encuentra en medio de hermosas montañas que hacen la forma de una ceja humana.
Este municipio se encuentra a 45 kilómetros de Medellín y tiene aproximadamente 55 mil habitantes.
Tierra de campesinos productores, pujantes y “echados palante”. Su principal economía son las flores, con exportaciones de unas 35 especies, lo que representa el 46 por ciento de las exportaciones del departamento de Antioquia.
Allí, en uno de los barrios más populares de este municipio, se encuentra la Asociación de Mujeres La Antioqueñita, que es liderada por Rosa Mery Pérez y su hija Katherine Arbeláez, quienes realizan un proceso de transformación de fruta y hortalizas en productos como almíbar, dulce de mora, jalea de uchuva, salsas agridulces, dulce quemado y mermeladas.
La Asociación de Mujeres La Antioqueñita fue fundada por Rosa hace más de 30 años, en un afán por aprovechar los conocimientos que desde muy pequeña adquirió en el campo. Pero también se creó como iniciativa que ayudara a generar ingresos y estabilidad para las mujeres más desfavorecidas de La Ceja y de esta manera empoderarlas.
Para ella, la mujer es parte fundamental en el desarrollo y progreso del campo colombiano: “Al comienzo la gente nos decía que no éramos capaces de crear una empresa, que no podíamos hacerlo.
Y entonces nosotros dijimos: vamos a mostrar que sí podemos. Por eso seguimos ahí, pues nuestro anhelo es seguir apoyando a las mujeres que tengan dificultades. Tenemos la historia de una mujer a quien le mataron a su esposo y le dimos el apoyo para que trabajara con nosotras. Por ahí comienza la paz”.
Durante un recorrido por la zona rural, donde estas mujeres recogen mora que utilizan en la transformación de sus productos, se siente la voz empoderada de Katherine en su papel de administradora: “Para mí, la mujer es importante porque tiene una doble participación en el campo: muchas veces participa con los hombres en el cultivo, pero por lo regular es quien prepara los alimentos no solo para la familia sino para todos los trabajadores.
Es un pilar esencial para que el ciclo productivo sea cada vez más profesional y competitivo”.
Cuando habla de su mamá, Katherine no duda en expresar su admiración por los 30 años de trabajo y lucha, que le han permitido a Rosa sostener “La Antioqueñita” como una marca reconocida en el municipio.
Para Katherine, su madre Rosa representa lo mejor del campo colombiano, y vuelve a resaltar que es un ejemplo de lucha y persistencia: “Desde que tengo uso de razón mi mamá ha trabajado, ha superado dificultades, ella ha tenido las ganas; con sus manitas hace muchas cosas, a pesar de las dificultades económicas”.
Inspirada en su mamá, envió un mensaje a todas las mujeres campesinas: “Sigan adelante, ahora hay muchas oportunidades para las mujeres, hay muchos programas en los que el gobierno prioriza a la mujer”.
En La Ceja, así como en los demás municipios de Antioquia, la Agencia de Desarrollo Rural ha realizado capacitaciones en temas de comercialización para diferentes grupos de mujeres.
Esto debido a que la comercialización es una de las principales problemáticas de los agricultores en nuestro país.
Asimismo, han participado en diferentes ferias de la región, que les han permitido ampliar alianzas comerciales con grandes marcas y
aumentar sus ventas a través de diferentes mercados campesinos.
Proyectos productivos en mano de nuestras mujeres En los últimos años, la Agencia de Desarrollo Rural (ADR) prioriza la cofinanciación de
Proyectos Integrales de Desarrollo Agropecuario y Rural, liderados por mujeres o que sean integrados principalmente por ellas.
Desde el año 2017, en los 32 departamentos del país, la ADR ha cofinanciado 450 proyectos productivos por valor de 511 millones de pesos, beneficiando de forma directa a 15.995 mujeres.
Dentro de las líneas productivas que se han cofinanciado se encuentran las relacionadas con la producción de aguacate, cacao, café, arroz, maíz, leche, entre otros. Muchas de estas mujeres son, además, víctimas del conflicto, jóvenes, indígenas y población afrodescendiente.
Desde el Cauca el presidente de la ADR, Luis Alberto Higuera, envió un mensaje a todas las mujeres rurales y manifestó su compromiso con las campesinas del país: “Ese abrazo
a la campesina va acompañado de voluntad política de producción, para que la mujer campesina tenga condiciones dignas con su familia, en su individualidad y con sus hijos,
para tener la Colombia que se merece, la que nos merecemos todos, una Colombia
potencia de vida”.
Para la vigencia 2024, la Agencia de Desarrollo Rural tiene abierta una convocatoria asociativa en la cual los proyectos agropecuarios liderados e integrados por mujeres,
tienen un puntaje adicional. La invitación de la ADR es a que las mujeres y, en general, los campesinos colombianos piensen en grande. Por eso, esta entidad adscrita al Ministerio de Agricultura estableció que los perfiles de negocio a los cuales se pueden presentar estarán entre los 1.200 y 5.000 millones de pesos.
La convocatoria está abierta hasta el próximo 4 de noviembre de 2023, y la información completa puede ser consultada la página web www.adr.gov.co