Insectos, hongos, bacterias y otras plagas ponen en riesgo la salud de varias de las especies de árboles más representativas de Bogotá, por lo cual el Jardín Botánico prioriza el manejo fitosanitario de las especies que se han visto más afectadas en los últimos años.
Cabe recordar que Bogotá tiene más de 1,4 millones de árboles y arbustos que engalanan las zonas urbanas de la capital por lo cual las actividades de cuidado, mantenimiento y protección de las coberturas vegetales que lidera el Jardín Botánico de Bogotá cobran la mayor importancia.
Suba, Kennedy, Usaquén, Engativá y Usme son las localidades con mayor número de árboles. Las especies que reinan en la ciudad son el sauco, jazmín del cabo, acacia negra, chicalá amarillo, acacia japonesa, holly liso y urapán.
Estos tesoros biodiversos se enfrentan a diario con varias amenazas como la contaminación atmosférica, los efectos del cambio climático (sequías o lluvias prolongadas), los comportamientos inadecuados de los ciudadanos y las plagas y enfermedades.
Este listado lo conforman 11 especies: caucho sabanero, falso pimiento, sangregado, chicalá amarillo, cedro, guayacán de Manizales, magnolio, urapán, yarumo, palma Alejandra y roble australiano.
El grupo de Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades (MIPE) ha identificado un listado de las especies más afectadas. Sin embargo, este número viene en ascenso desde hace varios años; antes eran solo cinco.
Entre las plagas que más enferman a estas especies están Pulvinaria caballeroramosae, Pulvinaria psidii, Pseudococcus, Calophya schini, Saissetia coffeae, Monalonion velezangeli, Drymoea veliterna, Aconophora sp, Trialeurodes vaporariorum, Cicadélidos, Phyllosticta sp, Tropidosteptes chapingoensis y Aleyrodidae.
Para los investigadores del Jardín Botánico es claro que Monalonion velezangeli, más conocido como chinche de la chamusquina del café, es una de las más críticas. Este chiche de color rojo fue reportado en la década de los 90 en plantaciones de café y aguacate de sitios como el Eje Cafetero.
En 2016, el Jardín Botánico reportó por primera vez la presencia de este insecto en Bogotá, justo en varios árboles de la especie falso pimiento. La introducción en la ciudad puso ser accidental y desde entonces se adaptó a las condiciones climáticas y naturales, lo que demuestra que tiene una capacidad adaptativa impresionante, incluso se estima que tienen un ciclo de vida máxima de 56 días, es decir que tiene varias generaciones al año.
Especies al detalle
Falso pimiento
Árbol con un follaje colgante, hojas de color verde ácido y frutos rojos que le sirve de alimento a varias aves. Calophya schini, Saissetia coffeae y Monalonion velezangeli, son las tres plagas que más lo enferman.
Los falsos pimientos se ven afectados por varias escamas, un sílido y el chinche de la chamusquina del café (Monalonion velezangeli). Esta última plaga logró adaptarse al clima de la ciudad y tiene en problemas a esta especie.
Sangregado
Árbol con hojas de color rojizo y que puede alcanzar una altura aproximada entre 18 y 20 metros. Sus hojas se ven afectadas por temporadas debido a la presencia de una larva masticadora de follaje, que corresponde al estado inmaduro de una pequeña polilla negra con naranja: Drymoea veliterna.
Caucho sabanero
Árbol de corteza es gris, hojas de color verde oscuro y flores pequeñas blancas y frutos rojizos. Las plagas que más lo enferman son los insectos de las especies Pulvinaria caballeroramosae, Pulvinaria psidii y Pseudococcus.
Urapán
Especie exótica de rápido crecimiento con una corteza lisa y hojas de un color verde intenso. El urapán se introdujo en Bogotá hace 70 años y desde mediados de los 90 se ha visto afectado por la chinche Tropidosteptes chapingoensis, originaria de México.
Chicalá amarillo
Árbol de 10 metros de altura, corteza gris fisurada y flores amarillas y llamativas. El JBB ha reportado la presencia de tres plagas en esta especie: Aconophora sp, Trialeurodes vaporariorum y Pulvinaria psidii.
Palma Alejandra y yarumo
Aleyrodidae, más conocida como mosca blanca, tiene en aprietos a dos especies representativas de la capital: la palma Alejandra, especie con un tronco anillado y esbelto; y el yarumo, árbol de hasta 30 metros de altura con hojas de gran tamaño.
Estas son dos especies que ingresaron en los últimos años al listado de árboles más afectados por plagas y enfermedades. Esto puede estar relacionado como una consecuencia del cambio climático.
Roble australiano
Árbol que puede alcanzar alturas superiores a los 40 metros y con ramas densas que se proyectan hacia arriba. Según la bióloga, se ha visto afectado por altas poblaciones de ácaros y recientemente se ha detectado la presencia de la chinche Monalonion velezangeli.
Cedro y guayacán de Manizales
Los Cicadélidos, una familia de insectos conocidos como salta hojas, afectan las hojas de estas especies que engalanan varias calles y parques de la ciudad.
Magnolio
Árbol con hojas grandes y de color verde oscuro con semillas rojas envueltas en un fruto cónico. Phyllosticta sp, un género de hongos, afecta seriamente sus hojas y tallos.
Medicina para los árboles
Todos los días, varias cuadrillas del Jardín Botánico recorren la ciudad para realizar tratamientos integrales a los árboles que se ven afectados por insectos, hongos, bacterias y otras plagas.
Se trata del equipo de trabajo encargado del Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades (MIPE), conformado por profesionales y operarios que realizan varias actividades que les sirven como medicina a los árboles.
Una de las acciones que más realiza este equipo es la aspersión foliar, una liberación o aplicación de una mezcla fitosanitaria a través de microgotas o nebulización que va dirigida al control de la problemática detectada en los diagnósticos preliminares.
También se realiza fertilización foliar, una técnica que al igual que la aspersión es una liberación de nutrientes a través de microgotas que cubren toda la copa del árbol; y la fertilización edáfica, una incorporación de nutrientes por el suelo, ya sea por riego fertilizado o insumo sólido.
La endoterapia es una técnica que consiste en instalar pequeños dispositivos alrededor del tronco de los árboles con un tratamiento previamente preparado. Es una de las actividades con mejor recepción por parte de la ciudadanía, aunque no es recomendada para todas las especies vegetales. Es ambientalmente amigable porque no hay liberación de moléculas al ambiente. En la endoterapia todo va por vía interna y es rápida y eficiente.
Entre tanto, la remoción de las plagas consiste en un lavado con presión regulada dirigida a los focos de insectos adheridos en el fuste o ramas de los árboles. Estos son plagas que casi siempre no son aladas ni pueden caminar, como las escamas. Se utiliza un aceite agrícola o jabón potásico para el lavado.
Una actividad complementaria que realiza el equipo de MIPE es la poda sanitaria, que consiste en el corte de las ramas que están muy contaminadas por una plaga o enfermedad o que ya están muertas. Esta práctica no puede superar el 30 por ciento del individuo arbóreo.
El subdirector Técnico Operativo del Jardín Botánico de Bogotá, Germán Darío Álvarez Lucero hace un llamado a la ciudadanía para que reporten los árboles de la ciudad que están siendo afectados por plagas y enfermedades. “Contamos con el correo arboladoadultomipe@jbb.gov.co para que los ciudadanos nos informen de manera oportuna aquellos árboles que evidentemente están enfermos, con su ubicación y en lo posible anexando fotografías”, precisó el funcionario