En un momento clave para la democracia colombiana, representantes del cuerpo diplomático acreditado en el país se unieron este martes al Compromiso por un proceso electoral libre y en paz, iniciativa liderada por la Defensoría del Pueblo, con el respaldo de la Delegación para las Relaciones Iglesia–Estado de la Conferencia Episcopal de Colombia, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU–Derechos Humanos), la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la OEA (MAPP/OEA) y la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia (UNVMC).
Durante el acto protocolario, la Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz; el delegado de la Conferencia Episcopal, Monseñor Héctor Fabio Henao; el jefe de la MAPP/OEA, Roberto Menéndez; el representante mde ONU ONU Derechos Humanos, Scott Campbell, y el Representante Especial del Secretario General y jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, destacaron el valor del Compromiso como un llamado urgente a blindar la democracia de la violencia, la desinformación y la estigmatización.
“Muchas personas que han seguido de cerca lo ocurrido en estas últimas dos semanas, tras el atentado, coinciden en que uno de los grandes retos es lograr que todas las personas firmantes del Compromiso lo asuman con genuina responsabilidad democrática.
Reconocemos que no todos parten del mismo lugar, pero confiamos en que este ejercicio público contribuya a generar coherencia entre lo que se firma y lo que se hace. Por eso, es fundamental no partir del escepticismo, sino del impulso por construir una cultura política más transparente, donde los acuerdos se honren y las agendas sean abiertas a la ciudadanía.”, afirmó la Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz.
Asimismo, la Defensora del Pueblo dejó claro que el monitoreo va a ser fundamental para acompañar el proceso, “hacer llegar alertas y recomendaciones a quienes eventualmente incumplan el Compromiso será clave para mantener un debate público sano. El ambiente electoral se construye, en gran medida, a partir del comportamiento de quienes participan directamente en el proceso”.
A su turno, el delegado de la Conferencia Episcopal, monseñor Héctor Fabio Henao, aseguró que todos deben trabajar en la implementación de una política de no violencia: “Formar a
