El coro de Capillas de la Fe es el primero en Colombia desarrollado profesionalmente para acompañar a las familias en momentos difíciles y apaciguar el dolor. Este grupo musical lleva 10 años trabajando de la mano de las directivas de la organización y, en sus inicios, del maestro Alex Mazabel. Entre sus más ilustres colaboradores se encuentra Arnoldo de Jesús Cruz Uribe, un antioqueño, oriundo del municipio de Abriaquí. Nació en 1953, es una persona con discapacidad visual y se dedica a la música desde los 5 años.
Arnoldo es un pianista profesional que se ha dedicado a este instrumento desde temprana edad. “Toda mi vida ha girado en torno a la música, especialmente el piano. A mi esposa, mi hija y mi nieta les gusta lo que hago y me admiran”.
A temprana edad mostró sus capacidades musicales, hasta llegar al conservatorio musical de la Universidad de Antioquia.
Posteriormente, se dirigió a la capital del país en busca de otras oportunidades. “En 2014, ya viviendo en Bogotá, me hice amigo de un señor que, sabiendo mi condición y las dificultades que tenía para conseguir trabajo, me ayudó a buscar un trabajo que tuviera que ver con mi habilidad para tocar piano”, añade Arnoldo.
“Arnoldito es un personaje espectacular. El hecho de su invidencia nunca ha evitado que haga su trabajo de la mejor manera. Es impresionante todo lo que puede lograr. Sólo con escuchar una canción la puede interpretar. Yo siempre lo he admirado, porque es un músico que tiene unas capacidades excepcionales”, comenta Johanna Osma, directora musical del Coro Capillas de la Fe.
El coro donde trabaja Arnoldo tiene aproximadamente 10 años y fue un esfuerzo del maestro Alex Majabel y directivos de la empresa para desarrollar este importante proyecto. “Somos 30 músicos de planta y buscamos siempre colaboradores profesionales, grandes artistas, pero que a su vez tengan una formación espiritual para poder interpretar de la mejor manera todas las emociones que en estos eventos suelen ocurrir”, afirma Osma.
A lo anterior, Arnoldo agrega: “La empresa ha sido importantísima para desarrollar mi pasión y poder socializar. Me he sentido bien y he aprendido mucho más de cómo es convivir con los compañeros. Para mí la música tiene importancia en todos los aspectos de mi vida. Ha significado no solamente el sustento económico, sino el sustento espiritual, que es lo que me aporta la música, y me ha permitido socializar, porque yo soy un poco introvertido”.
Para Arnoldo es importante hacer parte de esta organización, ya que, mediante su trabajo, contribuye a sanar y a curar a las personas desde ámbitos puramente espirituales. Es destacable que en Colombia existan este tipo de organizaciones y que se puedan seguir incluyendo otros actores de nuestra sociedad que no cuentan con herramientas equitativas.