Alcaldesa presentó la ruta para transformar la educación en los próximos 18 años y firmó el Pacto por la Educación

Bogotá le apostó a la creación de la Misión de Educadores y Sabiduría Ciudadana, un espacio diseñado para definir la política pública de educación para la ciudad. Luego de 15 meses de trabajo, este jueves 12 de agosto la Misión presentó sus resultados en la Biblioteca Virgilio Barco con la presencia de la alcaldesa Mayor de Bogotá, Claudia López Hernández; la secretaria de Educación, Edna Bonilla Sebá; estudiantes, docentes, madres y padres de familia.

“Voy a llevar en la mano todos los días nuestro informe de la Misión de Educadores y Sabiduría Ciudadana, para que no me dejen olvidar ni un segundo que esta es nuestra máxima prioridad, y que todos los desafíos que tenemos, los vamos a solucionar si recordamos cada día que la educación está en primer lugar”, expresó la alcaldesa mayor, Claudia López.

Entre las principales recomendaciones y conclusiones, se destacaron la búsqueda de una educación con igualdad de condiciones y oportunidades para todas las personas, con un enfoque más experiencial. Además, se considera una prioridad el reconocimiento de la diversidad humana, ya sea étnica, cultural, social, sexual y de género, así como la búsqueda de una educación incluyente.

“Recogimos las voces de 900 mil ciudadanos: niños, niñas, jóvenes, padres, madres, en torno a la educación. Hoy contamos con 900 mil ideas por la educación y esperamos, en estos meses, la retroalimentación de, mínimo, 100 mil personas. Solo tenemos palabras de gratitud para los 72 miembros de la Misión de Educadores y Sabiduría Ciudadana. ¡Vamos a soñar esta ciudad en torno a la educación!”, manifestó la secretaria de Educación, Edna Bonilla Sebá.

Si bien la Misión de Educadores y Sabiduría Ciudadana ya entregó los resultados, sus integrantes señalaron que la Misión y el compromiso por la educación continúan y serán ellos los abanderados de seguir poniendo la educación en primer lugar.

Tras entregar los resultados y para garantizar la continuidad de este proceso de transformación, se firmó el Pacto por la Educación de Bogotá, en el que participaron rectores y rectoras, concejales, empresarios, medios de comunicación, representantes de universidades y colegios públicos y privados, libreros, organismos internacionales, gremios y entidades del sector educativo, entre otros.

Esta es una muestra de que Bogotá está unida para poner la educación en primer lugar; por eso durante tres meses el Pacto por la Educación estará en la página de la Misión para que los ciudadanos puedan sumarse a la firma del mismo.

“Es nuestra convicción absoluta que nuestra verdadera sabiduría, está en la ciudadanía. Algunos tienen la inmensa fortuna y el privilegio de dedicarse a la educación como profesión, ellos son nuestros maestros y maestras. Otros, todos los demás, quizás no lo hacemos por profesión, pero todos lo hacemos por vocación. Aprendemos de nuestros propios errores, de múltiples formas”, agregó la Alcaldesa Mayor.

¿Cómo se construyó el informe de resultados? Bogotá y sus habitantes fueron protagonistas de la construcción de la hoja de ruta para la educación de la ciudad a través de tres diversas estrategias:

La consulta ‘Un millón de ideas por la educación de Bogotá’, lanzada en octubre de 2020 fue el espacio de participación ciudadana que convocó a 900 mil personas y 100 mil más harán la retroalimentación a los resultados de la Misión.

El trabajo de docentes de colegios públicos y privados, investigadores, expertos y pensadores de la educación. En total participaron 72 integrantes, de manera comprometida, gratuita y en torno a la transformación educativa.

Este trabajo se dividió en seis ejes temáticos: educación inicial, educación para todos y todas,
financiación de la educación, formación integral, jóvenes y adultos con capacidades y transformación pedagógica.

La Ruta de participación se llevó a lo largo de 30 sesiones de diálogo denominadas Mesas Estamentales del Sistema de Participación del nivel Distrital, conformadas por instituciones, organizaciones, padres, madres y cuidadores; madres comunitarias, comunidad educativa en general, actores sociales del sector rural, estudiantes con discapacidad cognitiva, jóvenes y maestros de SIMONU, entre otros.
¿Cuáles fueron algunos de los resultados más significativos?
La educación de Bogotá a corto y mediano plazo (2024 / 2030)
Educación inicial: bases sólidas para la vida Inicio y concertación del proceso para la Educación Inicial hasta los 8 años y el diálogo con el gobierno nacional al respecto.

Formación integral: más y mejor tiempo en los colegios Crear una política distrital de formación integral con un sistema de información de la formación integrado.

Transformación pedagógica
Precisar el alcance del “sistema multidimensional de evaluación” propuesto en el Plan de Desarrollo Distrital y definir las acciones y cronograma para su realización Jóvenes y adultos con capacidades: proyecto de vida para la ciudadanía, la innovación y el trabajo del siglo XXI

• Construcción de una base conceptual general sobre lo que la educación media puede y debe ofrecer: campos de pensamiento.
Educación para todos y todas: Acceso y permanencia con énfasis en educación rural fortalecer y ejercer la autonomía de las instituciones educativas.

Financiación de la educación y mejoramiento de la gestión
• Usar el cupo de endeudamiento para iniciar las transformaciones requeridas actualmente, mientras se gestionan recursos nuevos.
La educación de Bogotá a largo plazo (2038) Educación inicial: bases sólidas para la vida La coordinación institucional, el estado y la sociedad civil garantizan la atención am aspectos socioeconómicos, culturales y ambientales que rodean los niños, niñas y sus familias Formación integral: más y mejor tiempo en los colegios Definir plan de acompañamiento profesional, individual y por nivel, para que las instituciones educativas desarrollen y apropien su estructura curricular para la formación integral, incluyendo una mejora permanente y el acompañamiento profesional (orientadores escolares).

“Tenemos que lograr ese propósito y es que en el 2038, cuando la ciudad llegue al medio milenio, a los 500 años, tengamos la educación que todos los jóvenes de Bogotá se merecen, y que nos reclaman todos los días con razón”, puntualizó la Alcaldesa Mayor.

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