Recuperar una representación afro que sirva a la gente, fortalecer a las familias, abrir oportunidades económicas y respaldar a quienes protegen y trabajan legalmente en el país, son las propuestas con las que Jorge Iván Mina Lasso se presenta como candidato a la Cámara de Representantes por la Circunscripción Especial Nacional de Comunidades Negras.
La apuesta parte de una premisa clara: la política solo tiene sentido cuando mejora la vida cotidiana de las personas. Por eso, sus propuestas están pensadas para generar beneficios directos en los hogares, los barrios y los territorios.
Entre sus principales propuestas está recuperar la curul afro, hoy en manos de intereses políticos tradicionales, para ponerla al servicio real de las comunidades y del país. A esto se suma una agenda enfocada en fortalecer a las familias y a las mujeres, mediante proyectos de autonomía económica, acceso a la educación, créditos con apoyo estatal y redes de protección que garanticen entornos libres de violencia.
Otro eje central es el respaldo a quienes protegen el país de manera legal; Mina Lasso propone mejores condiciones laborales, acompañamiento familiar y un sistema integral de apoyo para la Fuerza Pública, reconociendo su labor y el impacto que tiene en la seguridad y estabilidad de las comunidades.
En materia económica, plantea impulsar el trabajo digno y legal, especialmente para los taxistas, con mejores condiciones laborales, seguridad social y garantías económicas. Además, propone beneficios e incentivos tributarios para actividades económicas en horario extendido en Bogotá y para las industrias musicales, culturales, turísticas y de espectáculos, con el objetivo de generar empleo, dinamizar las ciudades y fortalecer la economía.
Precisamente, detrás de estas propuestas hay una historia de vida marcada por el esfuerzo. Nacido en el Cauca, en una familia humilde, es el menor de once hermanos y fue padre desde muy joven. “Aprendí a no rendirme y a caminar con responsabilidad desde muy joven. Eso me enseñó que servir es ponerse en el lugar del otro”, afirma.
Su paso por la Fuerza Pública le permitió conocer los territorios y las realidades del país, y desde el Derecho ha trabajado en la defensa de derechos y el fortalecimiento institucional, siendo Director del Colegio de Abogados de la Fuerza Pública y Presidente de la Corporación de Abogados Afrodescendientes.
Mina reconoce la fuerza del pueblo afro y hace un llamado a la unidad. “Cuando caminamos juntos, avanzamos; cuando nos dividimos, perdemos representación”, señala.
Su mensaje final es sencillo y directo: caminar con la gente, escuchar y responder con hechos.
Jorge Iván Mina encabeza una lista construida desde el territorio, conformada por tres liderazgos que representan distintas luchas, oficios y regiones del país.
Uno de ellos es Jorge Andrés González Silva, oriundo de Buga, Valle del Cauca, conocido como el “Rey del Tejo en Colombia – Bambú”. Símbolo del renacer político afro, su liderazgo se ha forjado en el deporte, el emprendimiento y la formación comunitaria. Su mensaje es claro: “Si no estamos en la mesa, seguiremos en el menú”. Desde el Congreso, busca impulsar leyes que fortalezcan el acceso a la educación, el empleo, la innovación social y la participación real de campesinos y afrocolombianos históricamente excluidos.
También integra la lista Lorena de la Cruz Rodríguez, médica barranquillera radicada en Bogotá, pedagoga, gestora cultural y defensora de los derechos de las mujeres negras. Su liderazgo nace del trabajo cotidiano con comunidades invisibilizadas y representa la fuerza ancestral de las madres, maestras y lideresas afro. Su presencia en la lista no es simbólica: es una declaración de poder político femenino afro, de independencia y de conciencia.
De cara a las elecciones del 8 de marzo de 2026, Jorge Iván hace un llamado a la participación consciente y a la unidad. Recordó que, al momento de votar, es fundamental pedir el tarjetón de la Cámara Afro, buscar y marcar el símbolo del Consejo Comunitario Manuel Zapata Olivella – Todos Somos Colombia, representado por la mano, y señalar el número 301, para que la voz de las comunidades negras esté representada en el Congreso y se traduzca en acciones concretas para el país.






