En un logro sin precedentes para Sucre y para el país, tres playas de este departamento fueron recertificadas con el distintivo internacional Bandera Azul. Este reconocimiento, otorgado por la Fundación Mundial para la Educación Ambiental (FEE), simboliza un estándar global de calidad en sostenibilidad y cuidado medioambiental, convirtiendo a Sucre en el único departamento de Colombia con tres playas certificadas: El Edén y Palo Blanco en Tolú, junto a la Segunda Ensenada en Coveñas.
La certificación Bandera Azul además de evaluar la calidad del agua y la seguridad de las playas, exige criterios estrictos en cuanto a servicios, gestión ambiental, educación y accesibilidad.
Sucre ha cumplido con estos altos estándares, demostrando su compromiso con un modelo de turismo que respeta y preserva su entorno natural y refuerza las oportunidades económicas y sociales de las comunidades locales.
Para la Gobernación de Sucre, liderada por Lucy García Montes, esta recertificación es parte de un plan para impulsar un nuevo modelo de desarrollo económico que busca transformar al Golfo de Morrosquillo en un polo turístico de referencia mundial, con una infraestructura de calidad y una visión integral de sostenibilidad.
Los proyectos incluyen la construcción de malecones en Tolú y Coveñas, la modernización del aeropuerto local y un hospital de segundo nivel en la región, acciones que no solo mejorarán el acceso y los servicios para los turistas, sino que también generarán desarrollo para la comunidad.
Este logro coloca a Sucre como un ejemplo nacional en turismo sostenible, mostrando cómo la protección ambiental y el desarrollo turístico pueden ir de la mano. “Las Banderas Azules de nuestras playas son una invitación para que los visitantes disfruten de una experiencia única, comprometidos también con el cuidado del medio ambiente”, destacó la gobernadora, durante el acto de entrega de la certificación que se llevó a cabo en las instalaciones del Hotel Morrison en Bogotá.
“Lograr mantener la certificación de nuestras playas es un incentivo para que el departamento continúe consolidándose como un destino turístico de alta calidad y responsable con la biodiversidad”, agregó la mandataria.
Esta certificación internacional es posible una vez más gracias al trabajo articulado y responsable de las alcaldías de Coveñas y Tolú, el decidido apoyo de la Gobernación de Sucre, a través de la Secretaría de Desarrollo y Medio Ambiente, y el esfuerzo de la comunidad que ha sido fundamental en este proceso de sostenibilidad ambiental.
Cabe destacar que este proceso tuvo el acompañamiento técnico de la Asociación Colombiana de Ingeniería Sanitaria y Ambiental (Acodal).
Es así como Sucre demuestra con acciones que el turismo es una herramienta poderosa para el crecimiento económico y la protección del entorno, y se posiciona a nivel internacional como un territorio destacado en turismo sostenible y conservación en el Caribe colombiano.