El ministro de Defensa Nacional, Iván Velásquez, acompañado de la cúpula militar y de Policía, presidió un consejo de seguridad para escuchar las problemáticas de seguridad de la región de Caquetá y Huila, por parte de los gobernadores de los dos departamentos, alcaldes municipales y autoridades regionales.
Dentro de las conclusiones, el ministro Velásquez, destacó la necesidad de una respuesta unificada de las Fuerzas Militares y la Policía Nacional para abordar las preocupaciones de seguridad expresadas por los alcaldes, en cuanto a las amenazas y acciones criminales de organizaciones armadas ilegales que afectan su seguridad.
“Las amenazas que reciben, las acciones criminales de las organizaciones tanto al mando de ‘Iván Mordisco’ como al mando de ‘Calarcá’, en extorsiones, pero que, además, afectan la propia seguridad de los alcaldes (…) vamos a desarrollar las gestiones necesarias para que, la Unidad Nacional de Protección luego de recibir los estudios de nivel de riesgo que corresponden a la Policia Nacional, tome las medidas necesarias para mejorar la seguridad de los alcaldes”, manifestó Velásquez.
El titular de la Defensa, también condenó el uso de minas antipersona por parte de los grupos armados ilegales, especialmente en áreas cercanas a centros educativos, por lo que anunció acciones protección para niñas, niños, adolescentes y estudiantes: “Vamos a organizar una acción real de protección a niñas niños adolescentes, a estudiantes, a los centros educativos, para que esta operación de desminado pueda iniciarse en unos casos y proseguirse en otros”, expresó.
Además, el Ministro destacó la necesidad de solucionar el problema de extorsión que afecta a la población caqueteña y huilense, y expresó su esperanza de que el nuevo ciclo de negociaciones con los bloques ‘Suárez’, ‘Briceño’, ‘Magdalena Medio’ y el Frente ‘Raúl Reyes’ aborde este tema.
“Esperamos que ahora que se inicia el nuevo ciclo de negociaciones, este tema de la extorsión sea no sólo tratado, sino solucionado, particularmente esta grave afectación a la población que, además, como lo expresaba el gobernador del Huila, precisamente por la afectación generalizada de la población hace que la población tenga desconfianza sobre los procesos de negociación porque ve en la mesa una organización sentada que le está afectando de manera directa en su economía”, aseveró el Ministro.
Asimismo, Velásquez anunció el incremento de la Fuerza Pública para la Quinta y la Sexta División del Ejército Nacional, la implementación de las Fuerzas de Despliegue Rápido (Fudras) y la asignación de nuevos recursos para la Policía Nacional y las Fuerzas Militares.
“Respecto del Comando Específico del Caguán, que ha recibido 144 hombres adicionales, el próximo año también se incrementarán. La necesidad de fortalecer la inteligencia, que esto es un imperativo en todo el país y también desde el Ministerio de Defensa un seguimiento permanente a ese incremento en las capacidades de todas las Fuerzas y de la Policía Nacional en las capacidades de inteligencia, que unida a la investigación judicial, es también la otra manera de combatir los grupos armados organizados”, informó Velásquez.
En cuanto a la Policía Nacional, sostuvo el Ministro, llegará un grupo de operaciones especiales para Caquetá en el mes de diciembre: “Huila ya cuenta con uno de estos grupos, el GOES. Adicionalmente, llegarán nuevos miembros de la policía tanto para Caquetá como para el Huila, 70 nuevos policías para Caquetá, 50 policías para el Huila, en los próximos meses en la medida en que van saliendo de las escuelas de formación”.
También, se contribuirá en la recuperación de cámaras de vigilancia en el Caquetá. “El anuncio a los 88 captores biométricos que fueron entregados hace una semanas, 40 adicionales que se entregarán próximamente; de qué manera la tecnología al servicio de la seguridad puede incrementar también las capacidades de reacción de la propia Fuerza Pública”, dijo el ministro Velásquez.
Finalmente, el Ministro anunció el fortalecimiento de la Infantería de Marina con nuevos elementos y unidades fluviales para controlar los ríos y territorios, y la asignación de 200 soldados profesionales de la Fuerza Aérea Colombiana para el Caquetá.
