170 jóvenes se certificaron como promotores convivencia ciudadana y ambientes seguros para las mujeres

El proceso se realizó con el Idiprón y Corporación de Servicios Colombia Corservicol ONG, llevó 70 horas de formación presencial.

En las capacitaciones se cumplió con todos los protocolos de bioseguridad para evitar la propagación de la pandemia.

Dentro de las capacidades adquiridas, quienes participaron de esta capacitación aprendieron sobre prevención de violencias y acoso callejero.

6 de marzo de 2020, Bogotá D.C. – Este sábado 6 de marzo 170 jóvenes de la localidad de Los Mártires terminaron su proceso de formación para certificarse en convivencia ciudadana, luego de completar más de 70 horas de formación presencial, cumpliendo con las debidas medidas de bioseguridad.

En estos espacios, las y los participantes, adquirieron capacidades para la promoción de ambientes seguros, del autocuidado, la paz y la resolución asertiva de conflictos, al tiempo que recibieron capacitación en la prevención de violencias contra las mujeres y el acoso callejero.

“Con estas acciones, nuestra localidad avanza en la construcción de un territorio libre de violencia, además fortalecida en el reconocimiento de los derechos y deberes, enfocados especialmente en la prevención de violencias contra la mujer”, indicó la alcaldesa local (e), Tatiana Piñeros Laverde.

Las acciones se realizaron gracias a un trabajo articulado con el Idipron y el operador Corporación de Servicios Colombia Corservicol ONG.

Michael Rico, promotor social de Idiprón, apuntó que a estos jóvenes les interesó este proceso de formación por su interés además en ser desestigmatizados como seres conflictivos. “Quienes terminaron hoy este proceso tienen el conocimiento para prevenir las violencias, además con nuestro convenio con la Secretaría Distrital de Seguridad, Convivencia y Justicia, quienes se graduaron hoy podrán trabajar en la resolución de conflictos en el territorio”, explicó Rico.

Uno de los participantes fue Brandon Torres. Él dijo que, gracias al curso, aprendió que “las personas tenemos derechos fundamentales y derecho a convivir. Además, adquirí habilidades para trabajar en entornos conflictivos”.

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