En el propósito de garantizar ambientes de aprendizaje adecuados y seguros, la Secretaría de Educación del Distrito adelanta, de forma articulada con las instituciones educativas y las direcciones locales, una estrategia para el retiro, baja y disposición final de elementos inserviblesen los colegios distritales, y la puesta en uso de espacios útiles que se encontraban sirviendo como almacenamiento.
Durante la etapa piloto de la estrategia, se dieron de baja 82.371 elementos inservibles entre mobiliario, implementos de cómputo, de comunicación, elementos musicales, deportivos y libros en 160 colegios oficiales, 20 direcciones locales de educación y en áreas administrativas del nivel central.
“En los últimos tres meses, hicimos un proceso de bajas de más de 82 mil elementos en más de 160 colegios en toda la ciudad. Este retiro ayuda a tener espacios más seguros y además contribuye a que los espacios educativos realmente existan para lo que son, de tal manera que garanticemos que las niñas, las niñas y los jóvenes tengan la mejor calidad educativa posible”, aseguró Alejandro Cáceres, director de Dotaciones de la Secretaría de Educación del Distrito.
El funcionario, además explicó que este es un proceso que empezó con 21 instituciones educativas, en el que se buscó identificar de manera precisa cuáles son esos elementos que no estaban siendo usados y que se podían dar de baja y retirar para que liberar el espacio físico de las infraestructuras educativa.
Los elementos sólidos son entregados a la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos – UAESP y la recolección de residuos de aparatos electrónicos y eléctricos inservibles estará a cargo de la Secretaría Distrital de Ambiente, entidades que emiten el certificado de disposición final exigido por las autoridades ambientales que acreditan que no se está afectando el medio ambiente.
Así mismo, se implementó un formulario en línea para obtener en tiempo real un estimado de los elementos identificados para baja y, a partir de esta información, generar alertas tempranas para prevenir acumulación de implementos que pueda generar afectación a la comunidad educativa.
Es de señalar que, en desarrollo del proceso, la Secretaría de Educación, acompañó y asesoró a los colegios y Direcciones locales con atención personalizada para el levantamiento previo de las posibles bajas de mobiliario, material bibliográfico y equipos de cómputo y accesorios, lo que permitió minimizar los errores en el procedimiento.
En lo que resta del año, se realizarán tres procesos más con el fin de lograr que el 100% de colegios oficiales de Bogotá estén al día en sus inventarios y los espacios de los colegios se usen para lo que están diseñados, en vez de almacenar bienes que ya no tienen opción de ser usados.